jueves, 17 de mayo de 2007

El campo I


Me gusta el campo desde que tengo memoria. Me gusta echarme a correr y pararme de repente para oler algún insecto o algún resto orgánico. También me encanta tirarme al suelo, poner la barriga sobre la hierba y notar el fresquito. Si el estado del campo es lamentable, disfruto revolcándome, dando volteretas sobre mi lomo para impregnarme mejor de su olor nauseabundo. Cuando ya no puedo más me como los tallos altos de las hierbas que voy encontrándome, es lo mejor para refrescar mi boca y regular mi flora intestinal.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Lametón Samy,

El otro día comí demasiada hierba y vomité la comida... Creo que José Luis no se enfadó mucho.

Ya sabes que a mi también me encanta correr, pero no a las seis de la mañana! Hoy nos hemos levantado a esa hora y nos hemos ido a correr por el barrio... Hay alguien que quiere ponerse a tono para el verano...

Lametones,

Roko.

Anabel dijo...

Es que hay dueños que no tienen sentimientos y son unos egoístas... Dile al tuyo que también se puede correr un poco más tarde que no pasa nada... seguro que a las 6 de la mañana aún no han puesto ni las calles!!!

Lametones,

Samy